Un tratamiento de fertilidad requiere de un compromiso serio por parte del paciente. Esta persona debe estar consciente de que su estilo de vida debe cambiar durante el tiempo que dure el proceso y que tendrá que tomar precauciones extra para garantizar que todo el esfuerzo termine con un final feliz.
Descubrir la imposibilidad de un embarazo puede ser difícil de manejar, pero la buena noticia es que hoy en día existe una serie de tratamientos de fertilidad disponibles con excelentes resultados, capaces de devolver la esperanza a aquellas personas que desean tener un bebé.
El problema es todos estos abordajes están asociados a gastos financieros, además de costos físicos y emocionales con un éxito que no siempre está garantizado.
Por esta razón, durante el procedimiento, la persona que se somete al tratamiento, debe hacer todo lo que esté en sus manos para que las estadísticas estén a su favor.
Lo que debes y no debes hacer durante un tratamiento de fertilidad
Lo fundamental es comprender mejor cómo pueden funcionar determinadas opciones de tratamiento de fertilidad. Si bien es cierto que para cada alternativa habrá una descripción de los diversos pasos involucrados, además de instrucciones específicas sobre los medicamentos y otros datos importantes, existen recomendaciones generales que ayudan durante el proceso:
- Evitar los alimentos procesados, con alto contenido de azúcar o los edulcorantes artificiales y los alimentos hidrogenados con un alto contenido de calorías.
- Disminuir o eliminar por completo el consumo de cafeína, alcohol y chocolate.
- Reducir el consumo de soya, pues puede afectar los niveles hormonales en el cuerpo.
- Disminuir en lo posible el consumo de pescados, para no correr el riesgo de contaminación con altos niveles de metales pesados, como el mercurio.
- Es conveniente el consumo de alimentos ricos en vitaminas A, B6, B12, C, E y que contengan ácido fólico.
- Si eres una ávida corredora, lo mejor es reemplazar de forma segura tus carreras largas con un trote ligero, excursionismo, la elíptica o simples caminatas.
- Considerar deshacerse o evitar algunos artículos para el hogar hechos con químicos que alteran el sistema endocrino.
- Revisar la lista de medicamentos que consumes con tu médico de fertilidad, para evitar cualquier complicación.
- Tener en cuenta que los patrones de sueño y la fertilidad están estrechamente conectados, por lo que conviene tomar el descanso adecuado.
Otras consideraciones durante los tratamientos de fertilidad
Es importante entender que las tasas de éxito van a depender de muchos factores involucrados, como por ejemplo el tratamiento que se esté utilizando, las causas de la infertilidad, cuánto tiempo se ha experimentado la infertilidad y la edad; de manera que vale la pena discutir con el médico su experiencia con diferentes casos para entender cuáles son las probabilidades de tener un tratamiento exitoso.
Asimismo, se trata de un periodo en el que vale la pena buscar toda la información posible al respecto, para poder lograr un abordaje integral que permita que el objetivo se logre en un tiempo razonable, para así evitar la frustración y el desgaste que implica varios intentos fallidos.
Existen muchas esperanzas cuando se inicia un ciclo de tratamiento de fertilidad, pero desafortunadamente, no siempre funciona de manera inmediata. Si el resultado es negativo, esto no significa que el futuro es sombrío, y durante todo este periodo, mantener una actitud positiva y evitar el estrés, es fundamental para que todo funcione.
Si bien una parte importante de los tratamientos de fertilidad tiene que ver con el procedimiento en sí, también es cierto que los pacientes están obligados a poner de su parte y comprometerse a sentar las bases para un embarazo saludable, prestando mucha atención a su nutrición, además de realizar cambios de estilo de vida realistas, para garantizar una salud óptima.
